Capítulo 7. 3. Las Almas de los Animales

Capítulo 7. 3. Las Almas de los Animales.

Recuerdo una conferencia que tuvo lugar en el centro de la ciudad de Nueva York en la que, durante la sesión de preguntas y respuestas, una mujer sentada en la primera fila. me lanzó el siguiente desafío: "¿Cree usted que los gatos tienen alma?". Le respondí con un "¿tiene usted gatos?". Mientras la mujer dudaba unos instantes un amigo sentado a su lado sonrió y alzó su mano mostrando cuatro dedos en alto. De entre todos los amantes de los animales que en el mundo están interesados en esta pregunta, debo ser muy cuidadoso con aquellos que poseen gatos. Le dije a la señora de Manhattan que, dado que nunca había hipnotizado a un gato, no podría asegurar que los gatos tuviesen alma. Esto no la puso especialmente feliz hasta que agregué que algunos de mis clientes me han declarado haber visto animales en el mundo del espíritu.

        Las religiones han debatido durante mucho tiempo si los animales poseen alma. Las orientales dicen que las almas de los animales equivalen a las de los humanos. En el judaísmo existen diferentes niveles del alma, siendo las inferiores las de los animales y las superiores las del ser humano. Los musulmanes sostienen que los animales tienen espíritu pero esas almas no son inmortales pues no pueden elegir racionalmente entre cielo e infierno. Las religiones cristianas reservan el alma eterna exclusivamente a los seres humanos justos.

        Los propietarios de mascotas que interactúan con ellas proyectan mucha de su propia energía espiritual hacia esas criaturas, las cuales responden a ello con reciprocidad, de una u otra forma, dependiendo tanto del animal como de su personalidad. ¿Estos rasgos representan la presencia de un alma? Sabemos que los animales piensan, pero no estamos seguros del grado de ese pensamiento. Los perros son protectores, los gatos son ingeniosos, los delfines poseen complejos patrones de lenguaje. ¿Cualquier tipo de pensamiento racional, o su ausencia, establecería el criterio para considerar que un animal posee, o no, alma?

        Cualquier persona que tenga mascotas le contará que los animales tienen personalidades propias, sentimientos e incluso un sentido de las necesidades de sus dueños. Sabemos que los animales nos reconfortan en los momentos de pesar y enfermedad. Las mascotas tienen la capacidad de elevar nuestros espíritus y fomentar la capacidad de sanarnos al darnos amor y compañía incondicionales. Para aquéllos que creen que los animales sólo son seres sensibles que solo tienen sensaciones instintivas debo decir que si los animales poseen percepción del pensamiento entonces también tienen una energía individual en cierto nivel.

        Mis clientes dicen que cada animal posee su propia clasificación de energía inteligente y que las almas humanas no ascienden, ni descienden, la escala de una forma de vida a la otra. Estas partículas de energía varían desde formas complejas, como en el caso de los chimpancés, hasta estructuras más simples. A pesar del rechazo de mis clientes a la idea de la transmigración es posible que toda la materia orgánica e inorgánica proyecte energía vibracional en la Tierra y, probablemente, se relacione una con otra de forma intencionada.

        Me relataron varios clientes que han tenido conexiones con animales variados, en el mundo del espíritu, que todos ellos tienen, ciertamente, algún tipo de energía de alma. Ellas no son como las almas humanas y difieren, también, entre ellas mismas. Tras la muerte, la energía de estos animales, se dice, "existe en esferas diferentes a las del alma humana". Para las personas bajo trance hipnótico, las esferas son espacios, cada uno de los cuales posee sus propios patrones y funciones. He tenido un buen número de relatos informando sobre almas de animales en el mundo del espíritu y mi próximo caso es un buen ejemplo. Se trata de un cliente de nombre Kimoye.

Caso 50

Niúton.- Kimoye, ¿Qué le gusta hacer para divertirse?

SUJETO.- Francamente, soy muy tranquilo, poco sociable y disfruto haciendo dos cosas: practico la jardinería y juego con animales durante el tiempo que estoy lejos de mi grupo.

Niúton.- ¿Realmente cultiva cosas en el mundo espiritual?

SUJETO.- Crear cosas vivientes con energía es aquí uno de nuestros ejercicios importantes.

Niúton.- Cuénteme sobre sus juegos con animales.

SUJETO.- Tengo un perro, un gato y también un caballo. Son las mascotas de mi última vida.

Niúton.- ¿Aparecen cuando usted lo desea?

SUJETO.- No, debo llamarlos porque normalmente no viven en nuestros mismos espacios. Yo no puedo ir a sus sitios. Un Guardián de Animales me los trae. Les llamamos rastreadores.

Niúton.- ¿Quiere decir que los rastreadores tienen que encontrar a su mascota y no a una creada con energía, como usted  mismo podría hacer al igual que hace con una planta de su jardín?

SUJETO.- Así es..

Niúton.- ¿Los animales tienen alma, Kimoye?

SUJETO.- Sí, por supuesto, pero en muchas variedades.

Niúton.- ¿Cuál es la diferencia entre las almas animales y las humanas?

SUJETO.- Las almas de todas las cosas vivientes tienen diferentes... propiedades. Las almas de los animales tienen partículas de energía más pequeñas... de menor volumen y no son tan complejas ni multifacéticas como las del alma humana.

Niúton.- ¿Qué otras diferencias conoce entre las almas humanas y las de los animales?

SUJETO.- La principal diferencia, además de tamaño y capacidad, es que las almas animales no se rigen o conducen por el ego. No están agobiadas por cuestiones de identidad como lo estamos nosotros. Ellas, también, aceptan y se armonizan con su medio ambiente en vez de pelear por controlarlo como hacemos los humanos, (se detiene y luego agrega) Podemos aprender de ellos.

Niúton.- Dijo que las almas animales tienen su propio dominio en el mundo del espíritu. Entonces ¿cómo es usted capaz de asociarse con ellas sin la ayuda de un alma Guardiana de animales?

SUJETO.- (perplejo conmigo) Ellas tienen energía sensorial en la Tierra, igual que nosotros... compartimos su existencia física... por tanto ¿por qué no la mental...?

Niúton.- Bien Kimoye. Me dijo que tienen una configuración de propiedades diferentes a nuestra energía inteligente.

SUJETO.- También mis plantas, pero no se me niega su compañía, si la deseo.

Niúton.- Usted mencionó que juega con su perro. ¿Puede la energía de la planta convertirse en energía de perro?

SUJETO.- No, porque cada forma de vida tiene su propia variedad de energía... esta energía no cruza la línea hacia otra forma física en el mismo planeta.

Niúton.- ¿Quiere decir esto que un gato no puede transmigrar a una forma de vida superior y que un ser humano no puede convertirse en una forma inferior, dígamos en el cuerpo de un gato, en una vida futura?

SUJETO.- Sí, eso es correcto. La energía que se crea se asigna a ciertas formas físicas y mentales.

Niúton.- ¿Por qué cree que es así?

SUJETO.- (riéndose) . Aquí, no sé cosa alguna sobre el gran diseño, salvo que la mezcla de tipos de alma no es viable.

Niúton.- Dígame Kimoye, ¿Ve las almas animales de sus mascotas en grupos, tal como ocurre con su propio grupo de almas?

SUJETO.- Como le dije, no voy a sus sitios. Ellas no tienen necesidad de llamarnos para venir a vernos. No puedo decirle sobre esas áreas, excepto lo que el Guardián de Animales me contó sobre que hay una división general de grupos terrestres, grupos aéreos y grupos acuáticos.

Niúton.- ¿Está alguna alma de animal conectada con otra en el mundo del espíritu?

SUJETO.- Entendemos que las ballenas, delfines y focas están juntas; cuervos y halcones; caballos y cebras,... esa clase de cosas. Los animales tienen su propia conexión con comunidades unidas por especies generales que no se supone que debamos entender... al menos yo no lo entiendo.

Niúton.- Y... ?

SUJETO.- (descansando). Creo que si necesitáramos saberlo se nos diría.

Niúton.- Muy bien, volvamos a su comentario inicial sobre jugar con sus mascotas durante sus momentos de recreo. ¿Podría tener un animal salvaje, como un lobo?

SUJETO.- Solo si está domesticado.

Niúton.- ¿Puede explicarme esto, Kimoye?

SUJETO.- (frunce el ceño concentrándose en la respuesta). Para nosotros, las asociaciones con animales deben ser productivas en determinados escenarios y ser, así, motivados a trabajar con ciertas formas de vida Mi perro en la Tierra puede estar conmigo dentro de mi propiedad espiritual, el lugar en donde construí mi casa y jardín, porque es natural para él estar ahí. Él permanece conmigo porque fuimos compañeros de juego inseparables. Nuestro amor y respeto mutuo en la Tierra se renueva porque eso es bueno. Hay belleza en esto para los dos, (debe ser por esto por lo que se permite esta relación).

Niúton.- ¿Usted puede diferenciar entre el alma de un animal domesticado en la Tierra y otro salvaje?

SUJETO.- Pienso que sí. Como le dije, las almas de los animales son mucho menos complicadas que las humanas. Los animales domesticados son capaces de entregar amor y afecto a los humanos cuando lo necesitamos. Las de animales salvajes no están tan enfocadas en esta área y no nos entienden mucho. La mayoría de esas almas salvajes no deben ser obligadas, (y no deberían serlo por el solo hecho de compartir el mismo medio ambiente).

Niúton.- ¿Cree que hay más necesidad de libertad con el animal salvaje?

SUJETO.- Puede ser, pero las almas de todos los seres vivientes, especialmente nosotros, requieren libertad de expresión. Respecto del alma de los animales domesticados, ellos están más inclinados a entregar algo de su libertad a cambio de amor, afecto y protección. Hay simetría en el tener mascotas.

Niúton.- Kimoye, lo que dice suena como si los animales domésticos estuvieran en la Tierra para servir a los humanos.
SUJETO.- Como le dije, es un intercambio beneficioso para ambas partes. Aquellos de nosotros que amamos a los animales creemos que podemos comunicarnos con nuestras mascotas de algunas maneras. Cuando regresamos al mundo del espíritu y las vemos de nuevo, ambos en estado de alma pura, esto se hace más evidente.

Niúton.- ¿Todos en el mundo espiritual opinan lo mismo que usted sobre los animales?

SUJETO.- Muchos no tienen mi amor por ellos. Tengo amigos aquí que no desean interactuar con energía animal, incluso aunque algunos estuvieron conectados con animales en la Tierra. Ellos tienen otras actividades en su tiempo de recreo. (se detiene y luego añade) No saben de lo que pierden.

Las almas Guardianas de Animales parecen constituir un tipo de especialidad en el mundo espiritual. No es especialidad popular entre mis clientes pero su trabajo es muy apreciado por los que aman a sus mascotas. Estos guardianes se consideran vigilantes de zoológico. Una vez le pregunté a un cliente, que tenía conocimiento de las habilidades que esta especialidad requería, sobre mi viejo perro de caza de raza basset y de nombre Sócrates, mascota de la familia durante quince años. La pregunta era que si mi mente espiritual podría crear una casa y un cuerpo físico para mí mismo en el periodo de entre las vidas ¿acaso podría también reconstruir a mi perro? Me contestó lo siguiente:

Podría hacerlo si estuviera lo suficientemente avanzado en la creación de energía. Pero aun teniendo esa habilidad su perro no sería tan real como lo que un profesional podría hacer por usted. Un Guardián de Animales tiene la destreza para rastrear y encontrar la chispa de energía del alma que no murió con Sócrates y recrear a su perro exactamente como usted lo conoció en la Tierra. Su mascota le reconocerá y será capaz de jugar con usted y, cuantas veces lo desee, el Guardián vendrá.

Aparentemente, estos especialistas el la Guardia de Animales están con la Tierra y son almas que tienen la pericia de encontrar y recrear la esencia de ciertas formas de vida inferiores. Pienso en ellos como almas creadoras que parecen tener el deseo y la maestría de mantener esas formas de vida para nosotros, en el mundo espiritual, debido a su propio amor por las criaturas de nuestro planeta.

        Puede haber aspectos kármicos de vidas pasadas en nuestras asociaciones con animales en la Tierra y esa podría ser otra razón del porqué de la existencia de almas Guardianas de Animales. Tengo una clienta que es intensa activista en pro de los derechos de los animales en la actualidad y en vidas pasadas defensora del alivio del sufrimiento de los animales  desde una vida en Austria en el siglo XVI. Entonces, como joven austriaco, la familia de mi cliente se dedicaba al sacrificio de vacas y de cerdos para proveer el mercado lo cual le traumatizó. Hoy esta clienta llama a todos los animales "mis niños". Durante su vida, y entre vidas, dedica su tiempo libre a estar con ellos. También trabaja con su energía en un lugar llamado Espacio de Transformación para incrementar su percepción de las conciencias de los animales. Kimoye me contó esencialmente lo mismo cuando citó en su sesión: "Entré a esta cámara, que tiene un campo programado de energía animal, que me permite sentir lo que ellos sienten. Esto me permite penetrar en el entendimiento de los animales de la Tierra". Para ambos clientes, esta actividad representa tanto aprendizaje como divertimento.